El grupo insular de Nueva Canarias presentará en el próximo pleno del Cabildo una moción que plantea medidas urgentes y estructurales para frenar la creciente ola de actos vandálicos y el abandono que afectan al patrimonio cultural y arqueológico de la isla.
La propuesta, que será defendida por la consejera Sonia Álamo, parte de un diagnóstico alarmante: grabados rupestres vandalizados, yacimientos expoliados, construcciones tradicionales en ruinas sin inventariar ni proteger, y una ausencia generalizada de vigilancia y acción institucional.
“Cada día que pasa nuestro legado ancestral sufre nuevos actos de gamberrismo y vandalismo intolerables. Se deteriora de forma irreversible, y la ausencia de respuesta no es una opción», denuncia Álamo.
Propuestas concretas y acción inmediata
La moción de Nueva Canarias no se limita a pedir más estudios o campañas de sensibilización. Incluye actuaciones concretas, como:
- La creación de un Catálogo Insular del Patrimonio Cultural, georreferenciado y de acceso público.
- Identificación y protección reforzada de zonas de alta sensibilidad patrimonial.
- Regulación del acceso a yacimientos expuestos al turismo y las rutas no controladas.
- Implantación de vigilancia física y tecnológica.
- Financiación regular para restauración y mantenimiento, no solo actuaciones de emergencia.
Álamo advierte que gran parte del patrimonio en riesgo ni siquiera está registrado oficialmente: “No se puede proteger lo que no se reconoce. Y hoy gran parte del patrimonio majorero ni siquiera existe oficialmente”.
Guardianes del Legado: la ciudadanía toma la iniciativa
Como novedad, la iniciativa incluye la creación de la figura de los Guardianes del Legado: una red ciudadana organizada que agrupará a asociaciones, guías, investigadores y personas voluntarias ya activas en la protección del patrimonio.
“Si hay personas dispuestas a proteger lo que nos pertenece a todos, el Cabildo no puede seguir ignorándolas. Tiene que incorporarlas, organizarlas y darles herramientas”, subraya la consejera.
Una obligación legal y moral
Nueva Canarias recuerda que proteger el patrimonio cultural no es una cuestión ideológica, sino una obligación legal establecida en la Ley de Patrimonio Cultural de Canarias y el Código Penal.
“Un pueblo que se respeta protege lo que lo hace único. Si seguimos mirando hacia otro lado, seremos la generación que permitió que la historia de Fuerteventura se borrara con spray, abandono y silencio”.
La formación concluye con un mensaje claro:
“Esto no es una advertencia. Es la última oportunidad para actuar con seriedad y dignidad”.





